Mágicas Ruinas
crónicas del siglo pasado



carmencita masferrer


Llevará la música indoamericana a Rusia
Carmencita Masferrer será huésped oficial de la U.R.S.S.

TIENE alma de artista. Y el alma se asoma a sus ojos, dando expresión vigorosa a un rostro casi infantil. Ojos que hablan de una intensa vida interior, de un espíritu grande en esa silueta delicada. Carmencita Masferrer es artista. En sus movimientos hay ritmo; en su voz, riqueza de matices. Sus manos, al posarse en el teclado, adquieren vida propia: van de la caricia al movimiento enérgico, del salto ágil en las cadencias filigranadas, al suave deslizarse en los arpegios lánguidos. —Recuerdo el primer reportaje que me hicieron; fue para la revista “P. B. T.”; yo tenía, entonces, cinco años De edad...
Esta confesión rompe todos los protocolos, y más que una entrevista, es una charla; hablamos... de música, naturalmente. ¿De qué otra cosa puede hablarse con Carmencita Masferrer? Con ella, que a los cinco años de edad asombraba a los auditorios en sus conciertos, en los que interpretaba todas las composiciones de memoria; esa memoria prodigiosa, que es una de sus cualidades que asombran: en su repertorio actual, que incluye más de quinientas obras, pese a todas las dificultades técnicas, jamás actúa en público con la música en el piano. Su memoria, como ella lo ha manifestado en otras ocasiones, le permite ; “ver” los pentagramas que ha estudiado.
Su magnífica carrera artística es una sucesión de triunfos: después de los conciertos de “niña precoz’’, pasó a estudiar con Georges de La Levicz, y bajo su dirección reapareció ante el público de Buenos Aires, en 1927. Desde entonces su actividad ha sido múltiple: conciertos en nuestra capital, en las principales ciudades del interior, en Montevideo. Dos aspectos importantes de sus programas: la música de origen e influencia orientales (España y Rusia), y la indoamericana.
—No me he dedicado a la música para deleite propio o de los que me escuchan. Tengo, si no es mucha pretensión, la ambición de aportar un poco de cultura. No creo en el arte reservado de una minoría. Amo la música cuando es antes que nada, humana, lírica. Como descendiente de árabes, siento profundamente la música española y rusa. He dado a conocer en nuestro país la obra de los compositores jóvenes de la actual Rusia, y también he difundido la música nuestra, estilizada. Valoro la obra de muchos compositores argentinos, como López Buchardo, Williams, Corina Enriquez de Lima. Será esa obra, y en general la música indoamericana, que abarca además de nuestro país Chile, Brasil, Perú, Colombia, la que daré a conocer en Rusia, donde iré al finalizar este año, invitada por las autoridades de la U.R.S.S. Estoy contenta y orgullosa de poder llevar a tan lejano país nuestra música, y, a través de la misma, nuestro espíritu.
Carmencita Masferrer enuncia sus propósitos sin énfasis, pero con seguridad convincente. Nos habla de su labor en radio: fué la primera artista en su género en las emisoras argentinas. Actuó en Radio Cultura, en 1923. Desde entonces, se la ha escuchado por los más prestigiosos micrófonos : Splendid, Excelsior. Y, actualmente, sus recitales por L R 1 Radio El Mundo constituyen una de las notas artísticas de la citada broadcasting.

Pie de foto
Por su meritoria labor radiotelefónica, por su dedicación y su mérito interpretativo, y por el progreso que denota en cada nueva presentación en la Broadcasting Municipal, La Serranita puede ser considerada una de las figuras estelares.
del folklore argentino.
Radiolandia
15.05.1937
 

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