Mágicas Ruinas
crónicas del siglo pasado

Revista Extra
AÑO 6 Nº 62
SETIEMBRE 1970
DIRECTOR
BERNARDO NEUSTADT

EL MINISTRO DEL INTERIOR, TROILO SIN BANDONEON...
Muchos hombres claves, generacionales, mentalizados, forman parte de este gabinete. Dicho esto, sin desmerecer a quienes, en corrientes distintas, manejan otros valores y otras constantes. Eduardo McLoughlin, es uno de esos personajes "de reserva", con los que se soñó para el "Gran Momento". Experto en el "manejo" de una actitud política —en 1963, fue uno de los instrumentistas de un mejor vivir argentino que se frustró, todas las opiniones coincidieron en que estábamos ante un virtuoso del "juego limpio" y un claro exponente del comunicado 150. Como Julio Aguirre, como Manuel Laprida, como el propio Roberto Marcelo Levingston. A dos meses de estar ubicado en lo que debe ser el sitial del PRIMER MINISTRO, McLoughlin, no ha podido rendir al país la prueba de su real suficiencia. ¿Qué pasa? Simplemente que entre su designación y estos 60 días, algunos pensamientos ajenos a él, giraron de orientación. La conducción indicó otros orificios. McLoughlin, sirve para el JUEGO GRANDE. No es este su turno. La vacilación, no es su costumbre. La duda no es su filosofía de vida. Mientras no sepa adonde se quiere ir realmente, de sus labios no escaparán ni promesas ni horizontes. Porque no hay panorama claro. Porque, evidentemente, no quiere alambrar el país de palabras. Porque sabe que uno es esclavo de las frases que pronuncia. Y es dueño de las que calla. Frente a muchas impaciencias generacionales, el ministro, ancha espalda, erguida frente, modos suaves, congela la expectativa, porque es serio y responsable. No quiere ayudar a desencantar. Todo en un país difícil; donde Perón no manda corona al entierro de José Alonso, y donde "La Prensa", no se ocupa editorialmente de este crimen. Como si hubiera muertos "de primera" y muertos "de segunda".
Lo que ocurre es que por ahora, McLoughlin, es una especie de Troilo sin bandoneón. ¿Lo imaginan a Pichuco sin fuelle? ¿Qué quieren que toque? Además, el propio presidente Levingston ¿se mueve sin hipotecas? ¿Sabe ya su objetivo final? Entonces.. .
Todas las lecciones económicas que nos brinde el profesor Moyano Llerena, serán inútiles. NO GOZA DE FE PUBLICA. Y el país tiene "vaciadores espirituales". Augusto Vandor, Pedro Eugenio Aramburu y losé Alonso, destruidos físicamente por asesinos que operan sobre la apatía nacional, sobre millones de argentinos que no se sienten "dueños de la cosa", obligan a replantear el tema: precisamos UN PRIMER MINISTRO MENTAL. McLoughlin lo puede ser. ¡Basta de economistas ensayando explicaciones que irritan al país...! Son los fabricantes del desencanto... Si al menos viéramos que ALGO CRECE sobre la base de! sacrificio popular. Pero ¿qué crece?: las financieras que no saben dónde ubicar el dinero. La queja alberga a empresarios, obreros, banqueros, ganaderos, militares... Hasta la Policía se siente sola. .. Los asesinos, entonces, transitan con impunidad.
LA DIRECCION

SUMARIO
Intimo: 7 • Editorial: 15 • Señor presidente: para su gobierno: 16 • Plan político: 22 • Quiebras: 28 • Elecciones en Chile: 32 • Reportaje a José César Perlinger: 35 • Horangel: El hombre que preveía demasiado: 37 • ¿Esto es cursillismo?: 43 • Jiménez de Asúa: ¿Quién le puede decir viejo?: 46 • Reportaje a los que vuelven: 50 • Favio, el pretencioso: 52 • El comunicado 150: ¿Cuándo se cumplirá?: 54 • Mortales: 65 •Industria: ¡Viva la filosofía!: 70 • Los maxi-curas: 75 • Una pica en Flandes: 83 • Empresas: 86 • Crítico: 91 • PAGINAS CENTRALES: Primero Vandor, ahora Alonso.
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